¿QUE SIGNIFICA

LA VID VERDADERA?

En toda viña es necesario que haya una persona que cuide, limpie, riegue y vigile constantemente las plantas. Esta persona es el labrador o viñador.

Cada año el labrador tiene que limpiar el suelo en donde se encuentran las plantas, ver la condición de las mismas, recortar el exceso de hojas, podar las ramas para que los pámpanos o renuevos puedan crecer vigorosos y producir una buena cosecha.

El labrador quita las ramas secas que luego son echadas al fuego y quemadas. A veces por alguna plaga es necesario recortar las plantas hasta el mismo tronco de la mata, para que los renuevos surjan con más vigor y produzcan una cosecha abundante.

En el relato bíblico de la vid, Jesús dice que el labrador es su Padre. Y si Jesús es la vid nosotros somos las ramas o renuevos (pámpanos). Esto quiere decir que nosotros también somos cuidados por nuestro Padre celestial, somos podados y limpiados para producir mejor fruto. En casos graves hasta quitados de la vid y echados al fuego si estamos secos y no producimos fruto.

Hay que entender que una cosa es ser cortado, y otra es ser limpiado. Ser cortado significa que por decisión del del labrador la rama que enfermo y que ha dejado de producir es cortada y echada al fuego. Y otra cosa es; que la que ya está produciendo fruto es solamente limpiada. Jesús dijo: Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. Juan 15:1-2 

Las ramas secas se identifican con las personas que ya no viven en Cristo o dejan de tener una relación íntima con el Señor. A estas personas Dios las rechaza. Ejemplo de ello fue Judas Iscariote. El andaba con Jesús, era uno de sus discípulos pero su fruto era malo. Las ramas vivas son aquellas personas QUE ESTAN UNIDAS A CRISTO POR LA FE. Que forman parte de la Iglesia, están dando fruto y cuidan su relación con Dios.

De esta manera el Señor limpia y santifica a su iglesia.  A las cuales Dios les poda y limpia sus vidas con el agua de la palabra. Son lavadas de cualquier cosa que pueda estorbar el flujo de la vida de Cristo en sus vidas. … “para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha”. Efe 5:26-27 

La única manera de ser limpiados es por el oír y poner por obra la palabra en nuestra vida. Jesús dijo a sus discípulos, “Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado”. Jn 15:3 Y la verdad; nadie puede crecer en el Señor y ser perfeccionado sino permanece unido a la vid y en la unidad de la vid. Esto es, unidos a Cristo y ha su cuerpo a través de la unidad y su palabra.

Si las personas no se congregan dejan de oír la palabra, por lo tanto, se desligan voluntariamente del cuerpo de Cristo, aunque digan amar al Señor. Otros simplemente, aunque permanezcan congregándose aún no están del todo limpios. La palabra dice. “El que está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y vosotros limpios estáis, aunque no todos. Jn 13:10 y es verdad. Jesús dice que muchos no están del todo limpios.

Amados. Dejemos que el labrador nos limpie. Afírmate en la vid verdadera. Nosotros debemos echar raíces en Cristo y buscar el alimento de su Espíritu. Demos mucho fruto ganando almas para la gloria del Señor. pues .... “El fruto del justo es árbol de vida; Y el que gana almas es sabio”. Prov.11:30.

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